Morfina 1 mg/ml: Ficha técnica, solución para perfusión en jeringa precargada – SUN

La morfina es un medicamento ampliamente utilizado para el alivio del dolor intenso en adultos. La morfina tiene una potente acción analgésica y se clasifica como un opioide. El medicamento está disponible en dos presentaciones: Morfina Sun 1 mg/ml solución para perfusión en jeringa precargada y Morfina Sun 2 mg/ml solución para perfusión en jeringa precargada.

El dolor es una experiencia inevitable en nuestra vida, pero la morfina está aquí para ayudarnos a encontrar alivio y bienestar.

Composición cualitativa y cuantitativa

La composición de ambas presentaciones de morfina es similar. Por un lado, la Morfina Sun 1 mg/ml contiene 1 mg de morfina sulfato por cada ml de solución para perfusión, mientras que la Morfina Sun 2 mg/ml contiene 2 mg de morfina sulfato por cada ml de solución para perfusión. Además, cada jeringa precargada de 50 ml de Morfina Sun 1 mg/ml contiene 50 mg de morfina sulfato y cada jeringa de Morfina Sun 2 mg/ml contiene 100 mg de morfina sulfato.

Ambas presentaciones de morfina también contienen un excipiente con efecto conocido: sodio. Es importante destacar que cada jeringa precargada de 50 ml de Morfina Sun 1 mg/ml contiene 178 mg de sodio, mientras que cada jeringa precargada de 50 ml de Morfina Sun 2 mg/ml contiene 179 mg de sodio.

Forma farmacéutica

El medicamento se presenta en forma de solución para perfusión. Esta solución es transparente e incolora, lo que facilita su administración y control. Además, el pH de la solución para perfusión de morfina se encuentra entre 2,5 y 6,5, y su osmolalidad está entre 265 y 325 mOsm/kg. Estas características aseguran la estabilidad y seguridad del medicamento durante su uso.

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Indicaciones terapéuticas

La morfina está indicada para el alivio sintomático del dolor intenso en adultos. Es importante destacar que debe utilizarse solo en casos en los que el dolor no pueda ser tratado adecuadamente con otros analgésicos no opioides. Sin embargo, es necesario tener en cuenta las dosis adecuadas y el ajuste en función de la intensidad del dolor y la respuesta del paciente.

Posología y forma de administración

La dosis de morfina debe ser ajustada de acuerdo a la intensidad del dolor y la respuesta y tolerancia del paciente. Por lo general, se recomienda una dosis inicial de 1-2 mg de morfina sulfato por hora. Sin embargo, esta dosis puede ser ajustada por el médico según la necesidad del paciente.

Es importante destacar que no se debe superar la dosis diaria máxima de 100 mg de sulfato de morfina, a menos que sea necesario en casos de cuidados paliativos. Además, es fundamental tener en cuenta las instrucciones especiales para el ajuste de dosis en pacientes con enfermedades o condiciones concomitantes.

Es fundamental tener en cuenta que la morfina no debe ser utilizada durante más tiempo del necesario y se debe reducir la dosis de manera gradual antes de interrumpir el tratamiento. El uso adecuado de la morfina asegura un alivio efectivo del dolor y minimiza los efectos adversos asociados al medicamento.

Contraindicaciones

El uso de morfina está contraindicado en ciertos casos. Los pacientes que presenten hipersensibilidad al principio activo o a alguno de los excipientes del medicamento no deben utilizar morfina. Además, la morfina está contraindicada en casos de íleo, depresión respiratoria, enfermedad respiratoria obstructiva grave, abdomen agudo, enfermedad hepática aguda grave, trauma craneal agudo y presión intracraneal elevada en ausencia de ventilación controlada, epilepsia no controlada, y uso concomitante de agonistas-antagonistas morfónicos, antagonistas morfónicos parciales y oxibato sódico.

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Advertencias y precauciones especiales de empleo

Al utilizar morfina, es necesario tener cuidado y tomar precauciones adicionales en ciertos casos. Por ejemplo, en pacientes con antecedentes de adicción a opioides, conciencia reducida, trastornos respiratorios, enfermedad del corazón pulmonar, trastornos con presión cerebral elevada, hipotensión en pacientes con hipovolemia, entre otros.

Es fundamental tener en cuenta que el uso concomitante de medicamentos sedantes como benzodiacepinas o fármacos relacionados puede provocar sedación, depresión respiratoria, coma y, en casos extremos, la muerte. Por lo tanto, es importante tener cuidado al combinar estos medicamentos.

Es fundamental tener en cuenta que la morfina puede causar insuficiencia suprarrenal reversible. Por lo tanto, se debe tener cuidado y precaución al administrar el medicamento a pacientes con insuficiencia hepática grave y se debe considerar el ajuste de dosificación adecuado.

Información Adicional

Mecanismo de acción

El mecanismo de acción de la morfina se basa en su interacción con los receptores opioides en el sistema nervioso central. La morfina se une a estos receptores y produce una serie de efectos, incluyendo la analgesia, la sedación y la euforia. Al actuar sobre estos receptores, la morfina es capaz de bloquear la transmisión del dolor al cerebro y producir una sensación de bienestar y relajación.

Efectos secundarios

La morfina puede producir una serie de efectos secundarios, los más comunes incluyen náuseas, vómitos, estreñimiento y somnolencia. Sin embargo, es importante tener en cuenta que cada paciente puede responder de manera diferente al medicamento, por lo que es posible experimentar otros efectos secundarios menos comunes.

Interacciones medicamentosas

La morfina puede interactuar con otros medicamentos, lo que puede aumentar o disminuir su efecto. Por lo tanto, es importante informar al médico acerca de todos los medicamentos que se estén tomando, incluyendo los de venta libre y los suplementos dietéticos. Algunas interacciones medicamentosas pueden ser potencialmente peligrosas y deben evitarse.

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Precauciones de seguridad

Es fundamental seguir las indicaciones del médico y administrar la morfina de acuerdo a las indicaciones específicas del medicamento. Además, es importante almacenar la morfina en un lugar seguro y fuera del alcance de los niños.

Si se experimenta algún efecto secundario grave o se tiene alguna duda o preocupación acerca del uso de la morfina, se debe buscar atención médica de inmediato.

Preguntas frecuentes

  1. ¿Cuál es la dosis adecuada de morfina?

    La dosis de morfina debe ser ajustada por el médico según la intensidad del dolor y la respuesta y tolerancia del paciente. Es importante seguir las indicaciones del médico y no exceder la dosis máxima diaria recomendada.

  2. ¿Cuáles son los efectos secundarios más comunes de la morfina?

    Los efectos secundarios más comunes de la morfina incluyen náuseas, vómitos, estreñimiento y somnolencia. Sin embargo, cada paciente puede experimentar diferentes efectos secundarios, por lo que es importante comunicarse con el médico en caso de duda o preocupación.

  3. ¿La morfina puede interactuar con otros medicamentos?

    Sí, la morfina puede interactuar con otros medicamentos, lo que puede aumentar o disminuir su efecto. Por esta razón, es importante informar al médico acerca de todos los medicamentos que se estén tomando, incluyendo los de venta libre y los suplementos dietéticos.

  4. ¿Cuáles son las precauciones de seguridad al utilizar morfina?

    Es importante seguir las instrucciones del médico al utilizar morfina y almacenar el medicamento en un lugar seguro y fuera del alcance de los niños.

Conclusión:

La morfina es un medicamento efectivo para el alivio del dolor intenso en adultos. Su uso adecuado puede proporcionar alivio efectivo del dolor y mejorar la calidad de vida de los pacientes. Sin embargo, es importante seguir las indicaciones del médico y tomar precauciones adicionales para minimizar los efectos secundarios y las interacciones medicamentosas. Si se experimenta algún efecto secundario grave o se tiene alguna duda o preocupación, se debe buscar atención médica de inmediato.

Fuente de la información: Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios cima.aemps.es

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