Furosemida Sala 250 mg / 25 ml: Infusiones Diarias Recomendadas y Ficha Técnica EFG

La furosemida es un medicamento ampliamente utilizado en el tratamiento de diversos trastornos, especialmente aquellos que causan retención de líquidos en el cuerpo. Se clasifica como un diurético de asa, lo que significa que actúa sobre la nefrona, la unidad funcional del riñón, inhibiendo la reabsorción de sodio y agua. Esto resulta en un aumento significativo en la producción de orina y, a su vez, en la eliminación de líquidos acumulados en los tejidos.

La furosemida es una poderosa herramienta en el tratamiento de condiciones como insuficiencia cardíaca congestiva, cirrosis hepática, enfermedad renal y edema pulmonar. Su capacidad de incrementar la diuresis ha demostrado ser de gran utilidad en numerosas situaciones clínicas.

A continuación, se presentará un resumen detallado de la composición, indicaciones terapéuticas, posología y forma de administración, así como las contraindicaciones y posibles efectos adversos asociados con el uso de la furosemida.

Composición cualitativa y cuantitativa

Cada ml de solución contiene 10 mg de furosemida. Cada vial de 25 ml contiene 250 mg de furosemida (250 mg/25 ml).

Excipientes con efecto conocido

Cada vial de 25 ml contiene 3,75 mmol de sodio.

Forma farmacéutica

La furosemida se presenta en forma de una solución clara e incolora, esencialmente libre de partículas visibles. El pH de la solución se encuentra entre 8-9,3, lo que garantiza su estabilidad y eficacia.

Indicaciones terapéuticas

La furosemida se utiliza para tratar una variedad de afecciones que causan retención de líquidos. Entre las indicaciones terapéuticas más comunes se incluyen:

• Edema asociado a insuficiencia cardíaca congestiva, cirrosis hepática (ascitis) y enfermedad renal, incluyendo síndrome nefrótico: Estas condiciones provocan una acumulación excesiva de líquido en los tejidos y la furosemida ayuda a eliminar el exceso de líquido a través de la diuresis.
• Edema de pulmón: El edema pulmonar se produce cuando hay una acumulación de líquido en los pulmones, lo que dificulta la respiración. La furosemida actúa rápidamente para reducir este edema y mejorar la función respiratoria.
• Oliguria derivada de complicaciones del embarazo tras compensación de la volemia: La oliguria es una disminución en la producción de orina y puede ser un resultado de complicaciones durante el embarazo, como la preeclampsia. La furosemida se utiliza para mejorar la producción de orina y ayudar a eliminar los desechos del cuerpo.
• Como medida coadyuvante en el edema cerebral: El edema cerebral es una acumulación de líquido en el cerebro que puede ser causada por una lesión o una enfermedad. La furosemida se utiliza para reducir este edema y aliviar la presión en el cerebro.
• Edemas subsiguientes a quemaduras: Las quemaduras graves pueden resultar en la formación de edema en los tejidos circundantes. La furosemida se utiliza para reducir este edema y promover la curación.
• Crisis hipertensivas: La furosemida se puede utilizar para tratar crises hipertensivas agudas y controlar la presión arterial elevada.
• Mantenimiento de la diuresis forzada en intoxicaciones: En situaciones de intoxicación, la furosemida se puede utilizar para eliminar rápidamente las toxinas del cuerpo mediante la producción de orina.

Posología y forma de administración

La dosis diaria máxima recomendada de furosemida es de 1500 mg en adultos y 1 mg/kg de peso corporal en niños. La forma de administración más común es la perfusión intravenosa, lo que garantiza una absorción rápida y una acción terapéutica eficaz.

Contraindicaciones

Al igual que otros medicamentos, la furosemida tiene algunas contraindicaciones importantes que deben tenerse en cuenta antes de su uso. Estas incluyen:

• Hipersensibilidad al principio activo o a alguno de los excipientes: Si ha experimentado una reacción alérgica previa a la furosemida u otros componentes del medicamento, debe evitar su uso.
• Hipovolemia o deshidratación: En casos de disminución significativa del volumen de sangre o desequilibrio de los líquidos corporales, la furosemida puede empeorar la situación y causar complicaciones graves.
• Insuficiencia renal anúrica: La furosemida se elimina principalmente a través de los riñones, por lo que si los riñones no funcionan adecuadamente y no se produce orina, su uso está contraindicado.
• Hipopotasemia grave: La furosemida puede aumentar la excreción de potasio en la orina, por lo que su uso en personas con niveles bajos de potasio en sangre puede empeorar aún más esta condición.
• Hiponatremia grave: De manera similar a la hipopotasemia, la furosemida puede agravar una disminución significativa de los niveles de sodio en sangre.
• Estado precomatoso y comatoso asociado a encefalopatía hepática: La furosemida puede empeorar la función cerebral en pacientes con insuficiencia hepática grave y encefalopatía hepática.
• Mujeres en periodo de lactancia: No se recomienda el uso de furosemida durante la lactancia, ya que puede pasar a la leche materna y afectar al bebé.
• Embarazo (excepto bajo indicación médica): La furosemida puede tener efectos adversos en el feto, por lo que solo debe usarse durante el embarazo si el beneficio potencial justifica el riesgo para el feto.

Efectos adversos

Como con la mayoría de los medicamentos, la furosemida también puede causar efectos adversos en algunos pacientes. Estos efectos secundarios son generalmente leves y desaparecen una vez que se suspende el tratamiento. Los efectos secundarios más comunes incluyen:

• Alteraciones electrolíticas, deshidratación, hipovolemia: La furosemida puede afectar los niveles de electrolitos en el cuerpo, especialmente el potasio, el sodio y el cloro.
• Hipotensión, hipotensión ortostática: La furosemida puede causar una disminución de la presión arterial, lo que puede resultar en mareos o desmayos al levantarse rápidamente.
• Aumento del volumen de orina: Debido a su acción diurética, la furosemida puede aumentar significativamente la producción de orina.
• Nefritis tubulointersticial: En algunos casos raros, la furosemida puede causar inflamación de los túbulos renales, lo que se conoce como nefritis tubulointersticial.
• Náuseas, vómitos, diarrea, anorexia: Estos síntomas gastrointestinales son comunes durante el inicio del tratamiento con furosemida, pero tienden a desaparecer con el tiempo.
• Prurito, urticaria, erupciones, dermatitis bullosa: Algunos pacientes pueden experimentar reacciones alérgicas en la piel, como picazón, urticaria, erupciones o incluso dermatitis bullosa.
• Reacciones anafilácticas o anafilactoides graves: Aunque raras, estas reacciones alérgicas graves pueden ocurrir en algunos pacientes y requieren atención médica inmediata.
• Encefalopatía hepática en pacientes con insuficiencia hepatocelular: En pacientes con enfermedad hepática grave, la furosemida puede empeorar la encefalopatía hepática, que es una disfunción cerebral causada por la acumulación de toxinas en el cuerpo.
• Parestesias, vértigo, somnolencia, confusión: Algunos pacientes pueden experimentar sensaciones anormales en la piel, mareos, somnolencia o confusión durante el tratamiento con furosemida.
• Empeoramiento de la miopía, visión borrosa: Algunos pacientes pueden experimentar cambios visuales temporales, como visión borrosa o un empeoramiento de la miopía.
• Exacerbación o activación del lupus eritematoso sistémico: En pacientes con lupus eritematoso sistémico, la furosemida puede desencadenar una exacerbación de los síntomas.
• Mareo, desvanecimientos, pérdida de consciencia: En casos raros, la furosemida puede causar mareos intensos, desmayos o incluso pérdida de consciencia.
• Dolor de cabeza: El dolor de cabeza es otro efecto secundario comúnmente reportado durante el tratamiento con furosemida.

La furosemida es un medicamento muy seguro y eficaz cuando se utiliza según las indicaciones y la dosificación adecuadas. Sin embargo, es importante tener en cuenta que cada persona puede responder de manera diferente al tratamiento y puede experimentar diferentes efectos secundarios. Si presenta algún síntoma preocupante o persistente, es esencial consultar a su médico para obtener asesoramiento y ajustar el tratamiento si es necesario.

Además, es fundamental seguir las instrucciones de administración y no exceder la dosis recomendada. Tomar más furosemida de lo indicado puede tener efectos negativos en el equilibrio de líquidos y electrolitos del cuerpo, lo que puede causar deshidratación o desequilibrios electrolíticos graves.

Conclusión, la furosemida es un medicamento diurético ampliamente utilizado en el tratamiento de diversas condiciones que causan retención de líquidos. Su acción diurética potente lo convierte en una opción terapéutica efectiva para el alivio rápido de los síntomas asociados con el edema y la hipertensión. Sin embargo, su uso debe ser supervisado por un médico y seguir las pautas de dosificación adecuadas, ya que puede tener efectos secundarios y contraindicaciones significativos. Siempre es recomendable hablar con un profesional de la salud ante cualquier duda o inquietud.

Preguntas frecuentes

¿La furosemida es segura para el uso a largo plazo?

En general, la furosemida se considera segura para el uso a largo plazo cuando se utiliza según las indicaciones y se supervisa regularmente por un médico. Sin embargo, como con cualquier medicamento, es importante evaluar los beneficios y riesgos individuales antes de iniciar un tratamiento a largo plazo.

¿Puedo tomar furosemida si estoy embarazada?

El uso de furosemida durante el embarazo debe ser evaluado cuidadosamente por un médico. Aunque se ha demostrado que la furosemida puede tener efectos adversos en el feto, en algunos casos excepcionales los beneficios pueden superar los riesgos potenciales. Siempre es importante discutir cualquier preocupación o duda con su médico antes de tomar cualquier medicamento durante el embarazo.

¿La furosemida causa dependencia?

No, la furosemida no causa dependencia física. Sin embargo, puede haber una dependencia psicológica en algunos casos en los que el paciente siente que necesita el medicamento para controlar su afección. Es importante seguir las indicaciones de su médico y, si tiene alguna preocupación, hablar con él para evaluar las opciones de tratamiento adecuadas.

¿La furosemida interactúa con otros medicamentos?

Sí, la furosemida puede interactuar con otros medicamentos y causar efectos adversos o disminuir la eficacia de los mismos. Es importante informar a su médico sobre todos los medicamentos que está tomando, incluidos los de venta libre y los suplementos, para evitar interacciones negativas.

¿Cuándo debo tomar la furosemida?

La furosemida generalmente se toma una vez al día, preferiblemente por la mañana, para evitar interrupciones en el sueño debido a la necesidad de orinar con frecuencia durante la noche. Sin embargo, siempre siga las indicaciones de su médico y tome el medicamento según lo prescrito.

¿Puedo tomar alcohol mientras tomo furosemida?

El consumo de alcohol puede aumentar los efectos hipotensores de la furosemida, lo que puede resultar en una disminución aún mayor de la presión arterial. Por lo tanto, se recomienda evitar el consumo excesivo de alcohol mientras toma furosemida.

Referencias:

1. Ficha técnica de la furosemida. [Internet]. Disponible en: https://cima.aemps.es/cima/dochtml/p/25865/Prospecto_25865.html
2. Duarte JD. Use of Furosemide in Chronic Kidney Disease: What Features Can Guide Its Use? [Internet]. Disponible en: https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/29393134/
3. Furosemide. [Internet]. Disponible en: https://www.drugs.com/pro/furosemide.html
4. Lasix Prescribing Information. [Internet]. Disponible en: http://www.accessdata.fda.gov/drugsatfda_docs/label/2020/018963s188,018982s085lbl.pdf

Fuente de la información: Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios cima.aemps.es