Pulmicort 0,5 mg/ml: información técnica y uso de la suspensión para inhalación por nebulizador
El Pulmicort 0,50 mg/ml es una suspensión para inhalación por nebulizador utilizada en el tratamiento de enfermedades respiratorias, como el asma bronquial y el seudo crup muy grave. Contiene 1 mg de budesónida por cada ampolla de 2 ml.
“Controla la inflamación de tus vías respiratorias con Pulmicort y respira libremente.”
La budesónida es un glucocorticoide con un elevado efecto antiinflamatorio local. Actúa disminuyendo la reactividad de las vías aéreas y previniendo las exacerbaciones del asma. Es importante destacar que la dosis de budesónida debe ser individualizada y ajustarse a la dosis de mantenimiento eficaz más baja una vez controlado el asma.
Indicaciones terapéuticas
El Pulmicort está indicado para el tratamiento de mantenimiento con glucocorticoides para el control de la inflamación subyacente de las vías respiratorias en pacientes con asma bronquial. También se utiliza en el tratamiento de seudo crup muy grave, una enfermedad que provoca la inflamación de las vías respiratorias y que puede requerir hospitalización.
Posología y forma de administración
La dosis de budesónida debe ser individualizada y ajustarse a cada paciente. Puede administrarse una o dos veces al día, dependiendo de las necesidades de cada paciente. La dosis inicial recomendada varía según la edad y gravedad de la enfermedad.
Dosis inicial recomendada:
| Grupo de edad | Dosis diaria total |
|---|---|
| Adultos y ancianos | 1-2 mg, en casos muy graves se puede incrementar hasta 4 mg |
| Niños a partir de 6 meses | 0,25-1 mg, en casos muy graves se podría considerar una dosis inicial más elevada, por ejemplo 2 mg como dosis diaria total |
La dosis de mantenimiento varía también según la edad y gravedad de la enfermedad.
Dosis de mantenimiento:
| Grupo de edad | Dosis diaria total |
|---|---|
| Adultos y ancianos | 0,50-4 mg, en casos muy graves puede incrementarse |
| Niños a partir de 6 meses | 0,25-2 mg |
Para algunos pacientes, podría considerarse una dosis de mantenimiento de 0,25-1 mg de budesónida al día, administrada una vez al día por la mañana o por la noche. En caso de empeoramiento del asma, la dosis debe ser incrementada y dividida en distintas tomas a lo largo del día según sea necesario.
Es importante destacar que no se han establecido la eficacia y seguridad de la budesónida a dosis superiores a las recomendadas, por lo que siempre se debe seguir la dosis indicada por el médico.
Al utilizar medicamentos como el Pulmicort, es importante tener en cuenta algunas precauciones y efectos secundarios que podrían presentarse.
Efectos sobre el crecimiento: se recomienda llevar a cabo una monitorización regular del crecimiento de los niños que reciben tratamiento prolongado con corticoides inhalados. Aunque se ha observado un potencial efecto en el crecimiento, se debe considerar que el control del asma es fundamental para evitar complicaciones.
Exacerbaciones del asma: la budesónida inhalada ha demostrado ser efectiva en la prevención de las exacerbaciones del asma tanto en niños como en adultos. Es un medicamento que ayuda a controlar la inflamación y mejorar la función pulmonar, disminuyendo así el riesgo de complicaciones y crisis asmáticas.
Seguridad: el tratamiento con glucocorticoides inhalados puede afectar al crecimiento y la función suprarrenal. Por este motivo, es importante realizar un seguimiento adecuado en pacientes pediátricos para evaluar los posibles efectos en su desarrollo y monitorizar la función suprarrenal.
Reacciones adversas: entre las reacciones adversas más frecuentes se encuentran la candidiasis orofaríngea y las alteraciones visuales como cataratas y glaucoma. También se han reportado efectos psicológicos y de comportamiento, como ansiedad, depresión e hiperactividad, especialmente en niños. Es importante informar al médico si se presentan estos u otros efectos secundarios durante el tratamiento.
Sobredosis: en caso de intoxicación aguda con budesónida inhalada, no se esperan problemas clínicos graves. Sin embargo, siempre se debe seguir la dosis indicada por el médico y tomar las precauciones necesarias para evitar sobredosis.
Interacción con otros medicamentos: se ha observado interacción entre la budesónida y algunos medicamentos, como los inhibidores del CYP3A. Por este motivo, se debe tener precaución al combinar Pulmicort con estos medicamentos y se recomienda evitar la combinación con inhibidores potentes del CYP3A.
Embarazo y lactancia: la budesónida inhalada durante el embarazo no aumenta el riesgo de efectos adversos en el feto o recién nacido. Sin embargo, es importante consultar al médico antes de iniciar o continuar el tratamiento durante el embarazo. La budesónida se excreta en la leche materna, pero no se esperan efectos en los lactantes con dosis terapéuticas de Pulmicort.
Preguntas frecuentes
¿Puedo utilizar el Pulmicort para tratar el asma aguda?
No, el Pulmicort está indicado para el tratamiento de mantenimiento del asma bronquial y no para tratar una crisis asmática aguda. En caso de crisis asmática, se deben seguir las indicaciones médicas y utilizar los medicamentos de rescate adecuados.
¿Cuánto tiempo debo utilizar el Pulmicort?
La duración del tratamiento con Pulmicort debe ser determinada por el médico. El objetivo es controlar la inflamación y prevenir las exacerbaciones del asma a largo plazo. Por lo tanto, es importante seguir las indicaciones médicas y no interrumpir el tratamiento sin consultar antes al médico.
¿Puedo utilizar el Pulmicort si estoy embarazada?
La budesónida inhalada durante el embarazo no aumenta el riesgo de efectos adversos en el feto o recién nacido. Sin embargo, es importante consultar al médico antes de iniciar o continuar el tratamiento durante el embarazo para evaluar la necesidad y beneficio del tratamiento.
Conclusión:
El Pulmicort es un medicamento utilizado en el tratamiento de enfermedades respiratorias, como el asma bronquial y el seudo crup muy grave. Contiene budesónida, un glucocorticoide con efecto antiinflamatorio local. Su dosis debe ser individualizada y ajustarse a cada paciente. Se recomienda seguir las indicaciones del médico y estar atentos a posibles efectos secundarios. Siempre se debe consultar al médico antes de realizar cualquier cambio en el tratamiento.
Fuente de la información: Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios cima.aemps.es
